Cuando llegué a la casa en la que vivo a día de hoy (de alquiler), me enamoró uno de los muebles que tenía y me horrorizó ese perro de cerámica... ¡jajaja!
Así pues, cuando la dueña me dijo que no lo quería, que me lo podía quedar... mi cabecita se puso a dar vueltas sobre como podía restaurarlo, ya que los dueños anteriores le habían dado una pintura de mala calidad que se caía a cachos, además de haberlo pintado con desgana.
Así pues, cuando la dueña me dijo que no lo quería, que me lo podía quedar... mi cabecita se puso a dar vueltas sobre como podía restaurarlo, ya que los dueños anteriores le habían dado una pintura de mala calidad que se caía a cachos, además de haberlo pintado con desgana.
Así que después de lijarlo completamente, me puse a dar capas de pintura, lija, más pintura, más lija... unos tiradores y bisagras nuevas... y este es el resultado... ¿qué opináis? ¿os gusta?
Por cierto, el cuadro que veis encima del mueble de "Keep Calm and Carry on" está hecho por mí.
Después de restaurar el mueble me anime a darle una capita de pintura a la entrada y el pasillo, desde luego así queda mucho más personal.
Me encanta el cambio!. Donde va a parar lo bonito que te ha quedado ese rincón de tu casa. Enhorabuena!
ResponderEliminarCharo
Hola Ana, si su antiguo dueño lo viera ahora, dios lo as dejado precioso y parece completamente nuevo, bssss
ResponderEliminarPero si parecen dos muebles totalmente diferentes!
ResponderEliminarTe ha quedado espectacular
www.catalinalunares.com
ohhhh que cambio!! me encanta como te ha quedado!
ResponderEliminarEl resultado es estupendo y también le has dado un ambiente que lo envuelve todo... muy bonito.
ResponderEliminarUn abrazo